EL PRINCIPITO

Un día cuando el principito observa las puestas de sol sentado en su árbol baobab Ve que se avecina sobre él una cápsula a gran velocidad . El principito se escondió al fin de observar que era lo que se hallaba dentro de esa cápsula, y porqué aterrizaba en su planeta.

Era un niño de 10 años aproximadamente, el cual estaba aterrorizado. El principito al ver quee no suponía ninguna amenaza decidió acercarse y entablar conversación con el chico.

El niño no le miraba a la cara y estaba en su esquina haciéndose una pequeña bola mientras tiritaba, el principito le trajo una manta y algo de comer, entonces el niño apresuradamente cogió la comida y la manta y no dijo nada. Después de estar varios días cuidándole, el niño le preguntó, y ¿tú quien eres? Entonces el principito le contó su pequeña historia y apresuradamente le dijo que como había llegado aquí y porqué tenía tanto miedo.

El niño le contó que habían llegado otras criaturas a la tierra, estaba todo en llamas, sus padres murieron y su hermana mayor le metió en esta cápsula con el fin de que escapase y se salvase en otro planeta.

El principito le preguntó, ¿Hay más cápsulas? Y el niño le respondió que sí, pero que estaban por allí dispersas. El principito después de oír esto cogió su mochila la puso hasta arriba de sus menesteres y encendió su nave. El niño rápidamente le preguntó que iba a hacer, entonces los dos empezaron un nuevo viaje, un viaje el cual pretendía reunir a todos los humanos y otras criaturas para conseguir la tierra y mantener el equilibrio que había en la galaxia.

Después de días y meses recorriendo planetas desconocidos consiguieron reunir a muchísima gente.

Una vez reunidos todos para hablar de como recuperar la tierra el niño encontró a su hermana y acudieron todos a la ayuda de los humanos.

Con esta historia, quiero hacer un símil con la naturaleza, la cual está todo así porque debe estarlo, si quitas una especie de un lugar determinado alteras todo y tiene consecuencias, por eso todo el mundo acudió a la reconquista de la tierra, para mantener el equilibrio.

Manuel C.